Europa Ediciones: Edificar universos

Oilways loving you es una leyenda oleícola que se remonta a los albores de la humanidad. Durante el Neolítico, en la orilla sur del Mediterráneo, la naturaleza se siente bullir lo que estimula la creatividad y la inteligencia de los humanos. Nuestra heroína, Sabrosita Rusticana, cocinera de vocación, toma conciencia de que para lograr su sueño de inventar la cultura de la comida y de la cocina necesita la complicidad y la sinergia del honorable Don Acebuche, el olivo silvestre, a quien acaba por seducir. Este es el tema que narra nuestra leyenda: El afortunado encuentro de la cocinera y del olivo, cuyo amoroso final feliz entraña consecuencias sensuales, sensoriales, imaginativas, gastronómicas, sanitarias, técnicas y científicas. En efecto, de ese productivo matrimonio nace la familia de platos de las cocinas del Mediterráneo hoy encumbrada a modelo de la dieta perfecta en diálogo con la del Japón. Ninguna afirmación es inventada. Por el contrario, la versátil experiencia personal y profesional de su autora valida la veracidad de todos los secretos que nos revela en exclusiva la trama de Oilways loving you.

En un mundo que parecía abrirle las puertas a sus sueños, Laura llega a Oxford buscando libertad, futuro, propósito y encuentra a John. Y su vida cambia para siempre. ¿Quién es realmente el hombre al que ama? Encantador, brillante, perfecto. Un nombre que no es real. Una casa que no existe. Una cicatriz que no tiene historia. Lo que comienza como un amor romántico y apasionado entre dos almas aparentemente afines se transforma en un inquietante descenso a los abismos de la traición, la violencia y el miedo, donde cada gesto es una pista y cada silencio, una advertencia. ¿Cuánto se puede amar sin saber a quién? ¿Y cuánto estás dispuesta a perder por descubrir la verdad? Cuando tu muerte es mi liberación desdibuja la frontera entre el deseo y el control, entre el amor y el sometimiento, entre lo que se dice y lo que se calla, en una espiral de secretos y manipulación que nos obliga a mirar de frente las sombras que se ocultan, incluso, en los rostros más amables.